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Las automotrices deberán invertir en energía limpia si no quieren perder competitividad

29.12.2017 | Movilidad Sostenible

Las automotrices que no apuesten por la sustentabilidad quedarán fuera del tablero, indica la última investigación de CERES. Las políticas y estándares sobre emisiones presionan a las automotrices a invertir en movilidad eléctrica. Las mayores inversiones en I+D en eficiencia energética se están produciendo en las cadenas de valor de la industria automotriz.


El estudio de CERES, organización que nuclea inversores de Estados Unidos, concluye que la industria automotriz estadounidense está girando hacia las nuevas tecnologías de energía y aquellos que sigan sosteniendo el modelo tradicional de movilidad perderán competitividad en el corto plazo.

Los modelos de negocio de Tesla y Uber son mencionados en el estudio. También destaca los nuevos competidores como Google y Apple, que están entrando en los mercados de la automoción y de la movilidad emergente. En 2014, Google hacía público un prototipo funcional de vehículo autónomo. Dada la importancia de los costos de operación y la sinergia entre los vehículos autónomos y la electrificación, la eficiencia del combustible y las nuevas energías son fundamentales para triunfar en este mercado en rápida evolución, indica CERES.

El estudio resalta que las normas relacionadas a la eficiencia de combustible pueden proporcionar a los fabricantes de automóviles y proveedores la certeza reglamentaria necesaria para estimular la inversión en tecnologías avanzadas, como los vehículos eléctricos y los vehículos eficientes en combustible. En el mundo se multiplican las regulaciones que promocionan la movilidad eléctrica, como el caso de Holanda, Noruega y la India que se han propuesto metas ambiciosas en movilidad eléctrica. China, el mayor mercado de automóviles, anunció recientemente un objetivo del 40 por ciento de las ventas en 2030 serán vehículos "New Energy". El último en anunciar este tipo de compromisos fue Francia, que se propuso poner fin a la venta de coches de diésel y gasolina en 2040.

"Las normas relacionadas con la economía de combustible impulsan la innovación en tecnologías avanzadas que permitirán a la industria nacional prosperar en esta era de cambio", dijo Carol Lee Rawn, directora del programa de transporte en Ceres. "Las normas también actúan como una póliza de seguro, proporcionando un incentivo para que la industria del automóvil produzca una flota más avanzada. Una flota más eficiente reduce el riesgo de pérdida de cuota de mercado y ganancias en caso de que los precios del combustible aumenten".

Finalmente, el estudio destaca que las mayores inversiones en I+D en eficiencia energética se están produciendo en las cadenas de valor de la industria automotriz. Los proveedores del primer cordón (Tier 1) están generan empleo dos veces y media más que los fabricantes de automóviles, y han hecho la mayor parte de las inversiones en investigación, desarrollo y producción de tecnologías de ahorro de combustible.

Se prevé que en el período de los próximos 12 años (entre 2014 y 2025), los fabricantes de automóviles estadounidenses gastarán más de $ 110 mil millones en tecnología de ahorro de combustible, de los cuales $ 90 mil millones serán proporcionados por los proveedores. El estudio sostiene que el debilitamiento de las políticas y estándares sobre combustibles y emisiones podría perjudicar principalmente a los proveedores.

La investigación se puede descargar pulsando aquí.

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